El objetivo es convertir a profesionales y cuidadores en formadores expertos que puedan ayudar a personas que vivan este proceso

El Hospital Universitario de Jaén ha acogido una sesión formativa de la Escuela de Pacientes de Ictus, la primera en Andalucía en ponerse en marcha, en colaboración con la Asociación de Daño Cerebral de Jaén y la Unidad de Neurología, con el objetivo de convertirlos en formadores que puedan ayudar a personas que vivan este proceso.

La sesión ha tenido lugar en el Hospital Médico-Quirúrgico, a cargo del director de esta formación, profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública, y médico especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública y Doctor en Medicina por la Universidad Autónoma de Barcelona, Joan Carles March.

El ictus es una enfermedad cerebrovascular que se produce por la disminución u obstrucción del flujo sanguíneo. La sangre no llega al cerebro en la cantidad necesaria y, como consecuencia, las células nerviosas no reciben oxígeno, dejando de funcionar.

El ictus es una enfermedad tiempo dependiente y representa un problema de salud grave, con gran impacto socio-sanitario, siendo el problema neurológico grave más frecuente.

A pesar de los avances realizados en el manejo del ictus en Andalucía, se ha calculado una incidencia de 220 pacientes por cada 100.000 habitantes/año, lo que sumaría unos 18.000 ictus al año. Por ello, uno de cada cuatro andaluces sufrirá un ictus en algún momento de su vida.

Además, la Organización Mundial de la Salud prevé un incremento de la incidencia de ictus del 27% hasta 2025, debido al progresivo envejecimiento de la población.


Formación grupal

El formato grupal de estas intervenciones supone además un gran apoyo social y emocional en estos pacientes y/o personas cuidadoras, generando un espacio de desahogo y apoyo mutuo. Además, se pretende fomentar en ellas una actitud de afrontamiento activo ante estas situaciones.

La Escuela de Pacientes es una iniciativa de la Consejería de Salud y Consumo, coordinada desde la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), que nace con el objetivo de formar a pacientes y personas cuidadoras, que son los que padecen o viven la enfermedad de forma directa, para profundizar en el conocimiento de la patología con el objetivo de manejarla y afrontar sus diferentes fases. Es una metodología para aprender y enseñar las mejores formas de cuidarse y de cuidar.

Cuenta ya con más de 30 aulas de formación entre iguales, entre las que se encuentran aula sobre cáncer de mama, ostomías, EPOC, insuficiencia cardiaca, fibromialgia, diabetes, personas cuidadoras o enfermedad renal. Precisamente, el Hospital Universitario de Jaén ha sido el primero en la comunidad andaluza en desarrollar un taller sobre lupus y epilepsia.