Este proceso permite a la paciente una más rápida recuperación, y reduce la estancia hospitalaria

La aplicación de esta técnica hace posible evitar la histerectomía en muchos casos

El servicio de Ginecología del Hospital Universitario de Jaén ha incorporado recientemente un nuevo procedimiento quirúrgico que tratan el sangrado uterino anormal y abundante, y que benefician a la población femenina jiennense, ya que reducen complicaciones, estancia hospitalaria, molestias y la posible extirpación de útero por diversas patologías.

En concreto, este procedimiento es la destrucción local del tejido endometrial, que se realiza por vía histeroscópica, un procedimiento que se realiza en un breve espacio, ya que permite dar el alta a la mujer tan solo en 45 minutos. “Este nuevo procedimiento hace posible reducir el sangrado en un 85% en los siguientes dos años”, ha señalado la ginecóloga del Hospital Universitario de Jaén, María José Campos, que ha realizado las primeras intervenciones junto a la doctora Marieta Cárdenas.

El sangrado uterino anómalo lo es volumen, regularidad o termporalidad. Es una causa frecuente de consulta médica y representa un tercio de las consultas al ginecólogo, con un incremento del 70% en el caso de mujeres perimenopáusicas y postmenopáusicas. En España tiene una incidencia de 7 millones de mujeres.

Las técnicas de ablación endometrial puestas en marcha son procedimientos seguros y efectivos para el tratamiento del sangrado abundante, menor tasa de complicaciones y una solución para aquellos casos en los que el tratamiento médico no ha dado resultado.

En este sentido, el jefe de servicio de Ginecología del Hospital Universitario de Jaén, Jesús Presa, ha señalado que “con este tipo de intervenciones se amplía la cartera de servicios a la mujer desde nuestro centro, de manera que la paciente que lo precisa, y a la que puede aplicarse este procedimiento, se recuperará con mayor rapidez”.

El servicio de Ginecología ha incorporado igualmente otros procedimientos novedosos, como la cirugía endoscópica por orificio natural, para determinados procesos ginecológicos, lo que hace posible una mejor recuperación de la paciente, ya que evita incisiones, con la consiguiente inflamación y cicatrización y facilita el abordaje vaginal de la cirugía abdominopélvica.

La cirugía endoscópica transluminal a través de orificios naturales permite abordar ciertas patologías por vía vaginal sin tener que realizar abordaje abdominal alguno.

Se trata de una vía de abordaje diferente, ya que se opera con laparoscopia aprovechando la vagina como orificio de entrada natural al abdomen. Este nuevo procedimiento combina a laparoscopia, que permite una recuperación más rápida, y una menor agresión que la cirugía abierta, con el abordaje vaginal, sin incisiones.

Esta técnica se suma a otras recientemente incorporadas al servicio de Ginecología , como la radiofrecuencia para el tratamiento de los miomas en mujeres que lo padezcan. Este procedimiento es una alternativa a la cirugía más utilizada hasta ahora, y aporta, entre otras ventajas, una más rápida recuperación de la paciente, que regresa a su casa en el mismo día, y puede recuperar su actividad normal en dos o tres días.

Se realiza aplicando calor al mioma que va disminuyendo progresivamente de tamaño y de este modo mejorando así la sintomatología que ocasiona a la paciente sin necesidad de cirugía convencional, con lo que se reducen las molestias y acorta la estancia hospitalaria.

El mioma es un tumor benigno que crece en el tejido muscular uterino detectado en mujeres en las que es posible optar por la conservación del útero. Se trata de masas o formaciones anómalas de tejido que se originan en el útero, el aparato reproductor femenino, pudiendo afectar a entre un 40% y 50% de las mujeres en edad fértil. Son de carácter benigno, pero eso no les exime de riesgos y que puedan provocar numerosos problemas, tales como dolor, sangrado vaginal anómalo y disminuir la fertilidad y dificultar el embarazo.

Sus síntomas se pueden controlar con tratamiento farmacológico, si bien en algunas ocasiones, debido a su tamaño, peso o localización, los facultativos consideran necesario proceder a su extirpación para evitar las complicaciones aparejadas existentes y mejorar la calidad de vida en la paciente

El tratamiento por radiofrecuencia es una alternativa aplicable a mujeres que no pueden someterse a cirugía o que presentan miomas uterinos en localizaciones especialmente difíciles. La duración media de esta intervención, mínimamente invasiva, es de 30 minutos, permitiendo una rápida reincorporación de la mujer a su actividad habitual.